Si estás pensando en ser inversionista es porque ya estás cansado de trabajar durante largas horas y además piensas en el futuro porque nadie quiere esperar a que se le pase la vida solo trabajando sin tener tiempo para poder disfrutar. Aprovecha que este es el mejor momento para comprar casa en Estados Unidos.
Como inversionista, la forma en la que ves el mundo cambia. Está modalidad de negocio crece día a día porque la mayoría quiere generar ingresos adicionales para lograr la anhelada independencia financiera.
Es una forma de poner a trabajar tu dinero en lugar de trabajar por dinero, aseguras tus ahorros además de prepararte ante cualquier contingencia económica. Si, todo parece bueno cuando lo decimos de esta manera y puede que tengas miedo por lo complicado que piensas que es, pero aquí te vamos a explicar paso a paso cómo convertirte en inversionista.
¿Qué tipo de inversionista eres?
Antes de empezar a ser un inversionista debes identificarte con el tipo de inversionista que deseas ser y conocer el nivel de riesgo que estás dispuesto a asumir entre los perfiles que destacan en el mundo de las inversiones están:
- Perfil conservador: quieres que tu dinero comience a trabajar lo más rápido posible, te estresa la posibilidad de perderlo o esperar para ver el fruto de tu inversión.
- Inversionista moderado: quieres recibir beneficios más altos que los que te ofrece un banco y olvidarte de ese dinero por un período de 1 o 2 años.
- Inversionista agresivo: te interesan las ganancias elevadas y no temes perder parte de tu dinero.
Como te puedes dar cuenta, no se debe ser ni tan audaz ni tan temeroso en este mundo. Aunque quien no asume riesgos, no sabrá lo que pudo ser. Nosotros recomendamos comenzar como un inversionista moderado, pero todo depende de ti. ¿Qué prefieres comprar para alquilar o comprar para vender?
1. Establece el monto que deseas invertir y olvídate de él
Invertir no es lo mismo que ahorrar y esto es algo que debes tener muy claro. En este caso vas a adquirir un activo, un bien que te va a generar beneficios pero no vas a tener acceso a ese dinero en un período de tiempo más o menos largo por lo que es mejor que no hagas planes a corto plazo con ese dinero.
Cuando por ejemplo inviertes en la bolsa, existe el riesgo de pérdidas o ingresos menores a los esperados, mientras que las inversiones inmobiliarias suelen ser más estables por ser un bien.
Al momento de realizar una inversión, lo mejor es comenzar con una cantidad de dinero que no comprometa tu estabilidad financiera. Debes poder seguir costeando tus gastos básicos y tener paciencia.
2. Aprende a identificar los riesgos de una inversión
No es difícil calcular el riesgo, es cuestión de conocer cuánto vas a invertir, el tiempo que estás dispuesto a esperar para ver el retorno de tu inversión y tener presente que siempre existen factores externos qué impactan en el mercado.
Por eso es importante que obtengas la mayor información posible, aprende de expertos. Ellos ya han cometido errores, novatadas por las que tú no tienes que pasar. Son muchas las herramientas disponibles que tienes a tu servicio para poder aprender, aprovéchalas.
3. Invierte de manera segura
No seas un inversor emocional, es decir, está bien asumir riesgos pero no todos son necesario y debes apostar a lo seguro. Puedes invertir en un banco o en un seguro. Sin embargo, este tipo de inversión genera bajos beneficios y solo es una manera de que tu dinero no pierda valor.
Si entras en el rango moderado, los bonos de deuda, proyectos de crowdfunding y bienes raíces son la mejor opción.
4. No te conformes, diversifica
Como reza el dicho “no coloques todos tus huevos en una sola canasta”. Al invertir es bueno pensar en varias estrategias para evitar el riesgo de perderlo todo en una sola y así mantener un equilibrio en tus finanzas.
Por ejemplo, bienes raíces es un mercado seguro con buen rendimiento que fácilmente puedes combinar con otra estrategia de inversión menos o más riesgosa con otras oportunidades de ingresos.
Para invertir de forma segura te invitamos a contactar con nosotros y agendar una reunión gratuita en la que te ofreceremos solo lo mejor del mercado inmobiliario con una inversión mínima de $100,000. No dudes más, estas a un clic de distancia de tomar la mejor decisión para asegurar tu futuro financiero.